NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: Uno de los sueños más recurrentes seguro que es volar, pero el otro es respirar bajo el agua.

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: Yo creo que lo de volar tiene una edad.

NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: Y el buceo, ¿no tiene edad?

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: No, yo creo que no. Hoy en día se bucea desde los doce años hasta los ochenta años. Cada uno con sus limitaciones en función de la edad, pero, verdaderamente, limitaciones hay pocas para bucear.

NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: Para bucear con botella.

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: Con botella, eso es. Con equipo autónomo. La botella es el recipiente donde almacenamos el aire que vamos a respirar. En este caso, en el buceo recreativo, lo que se respira es aire. Los compresores cogen el aire de la calle, lo pasan por unos filtros, le quitan la humedad y las impurezas, y lo presurizan dentro de la botella.  

NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: ¿A qué presión está?

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: Normalmente a 200 bares de presión. O sea, que el compresor lo que ha hecho es coger esta botella de 15 litros y ha metido dentro 15 litros doscientas veces. Y ese es el aire del que disponemos para nuestra inmersión.

NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: ¿Cuánto tiempo puede durar?

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: Es muy relativo. Hay muchos factores que influyen en el consumo. Aparte de los factores personales, de cada buceador, el nivel físico y, sobre todo, la experiencia y su flotabilidad debajo del agua influyen. Y hay un factor determinante que es la profundidad a la que estés: cuanto más profundo menos te dura la botella. Hay unas leyes físicas que afectan a los gases: cuando la presión aumenta el volumen del gas disminuye, se comprime, y el gas se hace mucho más denso. Entonces, nosotros, cuando estamos debajo del agua, respiramos el aire a una presión mayor, el aire está más comprimido, y el volumen de los pulmones que llenamos siempre es el mismo, pero lo llenamos con el doble de aire, tres veces más o cuatro veces más. Entonces, esa es la eterna pregunta: ¿cuánto le dura una botella a un buceador? Pues, depende.    

NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: Y, cuando estáis buceand, cómo sabéis cuanto tiempo os queda?

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: Nosotros controlamos dos factores: nuestro gas, el aire, que es lo importante, y los tiempos, con unos ordenadores y unas tablas que nos dicen cuanto tiempo me falta para entrar en lo que se llama descompresión obligatoria, o sea, cuanto tiempo podría estar en el fondo que me permitiría hacer un ascenso directo desde el fondo hasta la superficie sin necesidad de hacer paradas obligatorias.

Hay una ley física que habla de la disolución de los gases. Para que la gente lo entienda: a nosotros nos pasa algo parecido a las bebidas carbónicas. Dentro de las bebidas carbónicas hay gas que se ha pasado a estado líquido. Se ha forzado, se ha presurizado el gas y se ha convertido en líquido, y está en estado líquido mientras se mantenga presurizado. A nosotros nos pasa algo parecido con el nitrógeno que respiramos. El oxígeno es lo que el cuerpo metaboliza, pero el nitrógeno se disuelve por todo el cuerpo. Mientras nos mantenemos buceando tenemos el nitrógeno disuelto en todos los tejidos, pero cuando empezamos a subir, la presión empieza a disminuir y el nitrógeno quiere volver a su estado original.

NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: Es como si abriéramos la lata…

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: Quitas el tampón, lo has despresurizado, y vemos salir las burbujitas de gas. Pues a los buceadores nos pasa algo parecido. Entonces, tenemos que controlar el nitrógeno y lo hacemos con esos tiempos máximos que nos dice el ordenador, y haciendo un ascenso lo suficientemente lento para dar tiempo a que ese nitrógeno lo eliminemos por el proceso de respiración.   

NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: Otro término relacionado con el buceo es la compensación. A nada que te sumerjas y te molesten los oídos te dicen: “tienes que aprender a compensar”. 

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: Eso ocurre por el aumento de la presión. El gas que hay en los espacios aéreos se comprime. Entonces, hay espacios aéreos del cuerpo que vamos a tener que compensar de alguna manera, y uno de ellos es el oído medio. La membrana del tímpano es lo que separa el oído externo del oído medio. El agua empuja por fuera, el aire que hay dentro se comprime y el tímpano se curva. Esto nos ocurre a todos. Entonces, tenemos que compensar: meter en el oído la misma presión que hace el agua para que el tímpano se mantenga equilibrado y no nos duela. La membrana del tímpano es muy blanda y en seguida nos produce dolor. La mejor manera de compensar es la maniobra de Valsalva: es pinzarse la nariz, taponar los orificios, y soplar por la nariz. Como no dejo salir aire por la nariz lo mando por las trompas a la cara interna del tímpano. Pero no solo compensamos los oídos, también los senos nasales y paranasales.

NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: ¿Con la misma maniobra?

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: Con la misma maniobra. Están unidos por unos conductos muy pequeños, y con la misma maniobra se van compensando a su vez los senos. 

NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: Tengo que admitir que hasta que lo he visto de cerca el chaleco nunca me había llamado especialmente la atención. Y he visto que no es un simple chaleco.

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: Este artilugio es lo que ha revolucionado el buceo. Esto es lo que ha hecho posible que el buceo recreativo haya crecido a los niveles que ha crecido, y que lo pueda practicar cualquier persona. Simplemente es un saco donde se monta todo el equipo, y ese saco lo hinchamos y lo deshinchamos a nuestro antojo a través de unos pulsadores. Entonces, cuando lo tenemos hinchado a tope me mantiene flotando en la superficie como si fuera una boya, no tengo que hacer fuerza, no tengo que mantenerme a base de aletas. Cuando queremos quedarnos en flotabilidad neutra a cualquier cota, a cualquier profundidad, le voy metiendo aire al chaleco hasta que me quede neutro.  

NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: Estáis en equilibrio a esa profundidad.

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: Estamos quietos, solo usamos las aletas como los barcos utilizan la hélice, sólo para desplazarnos. El mantenernos lo hacemos solo con el chaleco, y eso ha sido una gran ventaja, porque antes lo hacíamos a base de fuerza física.

NAGORE REMENTERIA; Elhuyar Fundazioa: Lo que queda claro es que uno no puede coger el equipo y echarse al agua sin saber cómo funciona.

OSCAR MAYOR; Buceo Donosti: Requiere hacer un curso de buceo. En el curso de buceo se enseña todo lo relacionado con los equipos: cómo son, para qué sirven y cómo funcionan. Y se enseña, además, los mínimos que tiene que saber un buceador sobre todas esas leyes físicas que nos pueden afectar, y qué no hacer para que no tengamos ningún problema y podamos disfrutar toda la vida de los fondos que tenemos que son espectaculares.